Capítulo 1169

Anthea se sentó junto a la cama, secándose el pelo. Acababa de ducharse y ponerse el pijama. Los pijamas estaban hechos de seda, que era suave y tersa. Cuando levantó la mano, las amplias mangas se deslizaron hacia abajo y revelaron su brazo hermoso y suave. Anthea puso un secador de pelo a su lado y empezó a secarse el pelo mojado con una toalla. Cuando escuchó que la puerta se cerraba, levantó la cabeza y vio que Adam regresaba con un plato de sopa en la mano. Anthea miró hacia atrás y preguntó: "¿Fue tu mamá?". "Sí", Adam asintió. Adam puso la sopa en el gabinete bajo junto a la ventana, se dio la vuelta y caminó hacia Anthea, "Déjame secarte el cabello por ti". Adam recogió el secador de pelo y dejó que Anthea se sentara en sus brazos, abrazándola como a una niña. La abrazó por detrás, le peinó el pelo con los dedos y encendió el secador de pelo. Con callos ásperos en las yemas de sus dedos, Adam frotó suavemente el cuero cabelludo de Anthea, haciendo que Anthea se sintiera relajad